Carlos García
(Hamburg)
La
relación entre el joven Borges y el poeta creacionista chileno Vicente Huidobro
merece un ensayo de conjunto, que abarque desde 1919-1920 hasta fines de los
años 40.
Planeo
escribir ese ensayo en otra oportunidad; en esta ocasión sólo deseo aclarar
un punto menor, pero que ha ocupado mi curiosidad desde hace unos años.
En
carta a Jacobo Sureda, del 25 de julio de 1922, Borges dice:[1]
En Ultra he sabido que me publicaron un artículo mío contra Huidobro, mas no he recibido aún el número.
El
primero en dar a conocer esa carta, el investigador peruano radicado en
Mallorca, Carlos Meneses, anota:[2]
Apareció en uno de los últimos números de Ultra.
Por la
época en que Meneses escribía, no se disponía aún de la reedición facsimilar
de Ultra (que apareció en 1993); hojéandola
hoy, se puede comprobar que el artículo de Borges no figura allí.
(En
el número 20 de la revista, muy anterior al que ahora nos ocupa, hay un texto
sobre Huidobro, de carácter positivo y solidario, pero no aduce firma alguna y
nada habla en favor de que sea de Borges. Conjeturo que es obra de Humberto
Rivas y / o de José Rivas Panedas)
Aunque
ignoro el paradero del texto de Borges, presumo que estaba relacionado con la
querella mantenida, por esas fechas, entre Huidobro y Guillermo de Torre acerca
de la originalidad del primero.[3]
El
último número aparecido de Ultra fue
el 24, fechado “Madrid, 15 de marzo de 1922”.
Pero
había cuando menos un número planeado, que debía aparecer en mayo de 1922, pero
que por motivos desconocidos, no lo hizo.
Por
casualidad, he descubierto el siguiente indicio, que ayuda a desentrañar el
enigma.
En la
contraportada de Cosmópolis 43, Madrid,
julio de 1922, se reproduce parte de lo que debía ser el índice de ese número
nonato de Ultra. Allí figuran estos
tres textos:
“La paradoja del Creacionismo”, por J. L. BorgesPoemas de J. R. Jiménez“Los espejos curvos de un humorista”, por G. de Torre
El
texto de Torre, que se ocupa críticamente de El movimiento V.P., de Rafael Cansinos Assens, se publicaría poco más
tarde bajo el título “Los espejos curvos de un humorismo forzado” en Cosmópolis 44, Madrid, agosto de
1922, 329-333; y luego en Nosotros
161, Buenos Aires, octubre de 1922, 271-274.
Según da a entender mediante carta inédita y sin
fecha, pero de hacia mayo de 1922, Borges había leído poco antes la novela de
Cansinos aparecida en 1921 (reedición facsimilar, con
prólogo de Juan Manuel Bonet: Hiperión, Madrid, 1978. Reedición no
facsimilar, con una posdata de Bonet: Madrid. Viamonte, 1998). En
ella, el español parodia la escena ultraísta.
Torre es zaherido allí bajo el sobrenombre “El Poeta Más Joven”, por lo cual no
asombra que quiera comentarla públicamente (Borges le aconseja no hacerlo).
Ignoro
qué poemas habría aportado esta vez Juan Ramón Jiménez a Ultra, revista dirigida por los hermanos Humberto Rivas y José
Rivas Panedas, y en la cual había colaborado ya el año anterior.[4]
Interesa
resaltar que ese anuncio de Ultra aparecido
en Cosmópolis no reproduce todo el
índice, sino apenas un extracto que se limita a proyectos, temas y autores que
interesaban a Torre por alguna razón:
Borges,
porque ya era (a despecho de lo que afirman otros investigadores), su
incipiente cuñado, además del nexo con numerosas revistas europeas;
Jiménez,
porque por estas fechas Torre estaba intentando ganar sus favores literarios
(véase mi edición del epistolario entre ambos);[5]
Y last, not
least... Torre mismo. Recuérdese
que Torre era secretario de redacción de Cosmópolis:
podía así decidir qué se publicaba y comentaba o no en la revista. Por eso no
pierde oportunidad de mencionar su propio trabajo.
Es
decir, del índice de Ultra Torre recoge
en la nota de Cosmópolis sólo lo que
le parece interesante o útil a sus fines, en relación con proyectos propios y aliados.
Es, también, una manera de hacer cultura, de influir en el campo cultural, objetivo
que Torre tenía en claro y perseguía desde muy joven. En este caso, ayuda a
resolver un enigma no por pequeño menos insidioso.
(Hamburg,
15-VI-2014)
[1] Jorge Luis Borges: Cartas del fervor. Correspondencia con Maurice Abramowicz y Jacobo Sureda (1919-1922). Prólogo: Joaquín Marco. Ordenamiento y notas, semblanzas, bibliografía: Carlos García. Edición de Cristóbal Pera. Barcelona: Galaxia Gutenberg / Círculo de Lectores / Emecé, 1999, 224.
[2] Jorge Luis Borges: Cartas de juventud (1921-1922). Edición y estudio crítico de Carlos Meneses. Palma de Mallorca: Orígenes, 1987, 77, n. 4.
[3] Al respecto, véase mi trabajo: “La polémica Huidobro-Torre a la luz de correspondencias inéditas (Cansinos, Vando-Villar, Reyes, Ramón)”: Gabriele Morelli / Margherita Bernard , Eds.: Nel segno di Picasso. Linguaggio della modernià: dal mito di Guernica agli epistolari dell’Avanguardia spagnola. Atti del Congresso Internazionale, 16-17 aprile 2004, Università degli Studi di Bergamo. Milán: Viennepierre, 2005, 121-141 (versión reducida). Reproducido en versión original en mi edición de la Correspondencia Alfonso Reyes-Vicente Huidobro, 1914-1928. México: El Colegio Nacional, 2005, Apéndice. Trabajo en una actualización de ese texto, que considera las novedades aparecidas en los últimos nueve años.
[4] En cuanto a la relación de Jiménez con ellos y su revista, véase Juan Ramón Jiménez: Epistolario II, 1916-1936. Edición de Alfonso Alegre Heitzmann. Madrid: Publicaciones de la Residencia de Estudiantes, 2012, 206-207. No hay menciones de los hermanos Rivas ni de Ultra en el año 1922. Pilar García-Sedas ha publicado una monografía sobre el primero: Humberto Rivas Panedas: El gallo viene en aeroplano. Poemas y cartas mexicanas. Sevilla; Renacimiento, 2009. Ella y yo daremos próximamente a luz el volumen: José Rivas Panedas, 1898-1944. Poeta ultraista, poeta exiliado (Textos recuperados), en prensa en Madrid.
[5] Cf. Carlos García: Correspondencia Juan Ramón Jiménez / Guillermo de Torre, 1920-1956. Madrid / Frankfurt am Main: Iberoamericana / Vervuert, 2006. Por un raro azar, no se conservan cartas del año 1922, aunque seguramente las hubo.
[2] Jorge Luis Borges: Cartas de juventud (1921-1922). Edición y estudio crítico de Carlos Meneses. Palma de Mallorca: Orígenes, 1987, 77, n. 4.
[3] Al respecto, véase mi trabajo: “La polémica Huidobro-Torre a la luz de correspondencias inéditas (Cansinos, Vando-Villar, Reyes, Ramón)”: Gabriele Morelli / Margherita Bernard , Eds.: Nel segno di Picasso. Linguaggio della modernià: dal mito di Guernica agli epistolari dell’Avanguardia spagnola. Atti del Congresso Internazionale, 16-17 aprile 2004, Università degli Studi di Bergamo. Milán: Viennepierre, 2005, 121-141 (versión reducida). Reproducido en versión original en mi edición de la Correspondencia Alfonso Reyes-Vicente Huidobro, 1914-1928. México: El Colegio Nacional, 2005, Apéndice. Trabajo en una actualización de ese texto, que considera las novedades aparecidas en los últimos nueve años.
[4] En cuanto a la relación de Jiménez con ellos y su revista, véase Juan Ramón Jiménez: Epistolario II, 1916-1936. Edición de Alfonso Alegre Heitzmann. Madrid: Publicaciones de la Residencia de Estudiantes, 2012, 206-207. No hay menciones de los hermanos Rivas ni de Ultra en el año 1922. Pilar García-Sedas ha publicado una monografía sobre el primero: Humberto Rivas Panedas: El gallo viene en aeroplano. Poemas y cartas mexicanas. Sevilla; Renacimiento, 2009. Ella y yo daremos próximamente a luz el volumen: José Rivas Panedas, 1898-1944. Poeta ultraista, poeta exiliado (Textos recuperados), en prensa en Madrid.
[5] Cf. Carlos García: Correspondencia Juan Ramón Jiménez / Guillermo de Torre, 1920-1956. Madrid / Frankfurt am Main: Iberoamericana / Vervuert, 2006. Por un raro azar, no se conservan cartas del año 1922, aunque seguramente las hubo.